Entre tantas derrotas, una victoria ciudadana
Por Andrea Burt*
Recientemente, instalaron nuevas columnas de mediana tensión en mi barrio. Las mismas servirían para soportar los cables de la sub estática, que supuestamente evitarían los excesivos cortes de luz. Con la ilusión de tener un mejor servicio de energía eléctrica, soportamos el movimiento y ruido de grandes máquinas y camiones durante dos días. Cuando salimos a ver el trabajo terminado, encontramos que una de las nuevas columnas fue instalada ¡en el medio de la vereda! Nuestra primera reacción fue de asombro, luego risa y finalmente indignación. ¡¿Cómo la ANDE sigue instalando columnas en el medio de las veredas de Asunción?!
Hablamos con la empresa contratista para solicitar mover la columna mal instalada. Nos respondieron que la misma figuraba en el plano de la ANDE en ese lugar, y que no la podían mover sin el permiso de la institución. No obstante, se comprometieron a ampliar la vereda para que los peatones caminen ¡alrededor de la columna! Para la semana siguiente, las baldosas ya estaban fijadas, como una hilera más, en la parte afectada. Me sorprendió ver la predisposición de la empresa y pude notar que se dieron cuenta del error, y que necesitaban el visto bueno de la ANDE para corregirlo.
Fue ahí cuando acudí a Twitter. Hice pública la historia de la columna de mi barrio, y sumé suficientes likes y retuits, que hasta me escribieron de dos medios para hacer una nota sobre la columna. En respuesta a la indignación colectiva de la ciudadanía, la ANDE se puso en contacto conmigo, y a primera hora del lunes siguiente, volvieron al barrio las grandes máquinas y camiones. No hubo tiempo para que la columna saliera en los reportajes: una nueva fue instalada fuera del paso, como debería haber sido desde un principio.
Todos los ciudadanos tenemos el derecho a la ciudad. Esto quiere decir que la ciudad es una responsabilidad colectiva, pero al mismo tiempo, debe ser accesible para personas de todas las edades, con o sin discapacidad, con carritos de bebés o de súper, y en bicicletas. Las veredas están para ser transitadas de forma segura, y no es aceptable que el peatón deba caminar por la calle para desviar una columna.
Si bien hay miles de postes de hormigón mal instalados en Asunción, debemos exigir a los entes gubernamentales que, desde ahora en más, realicen la instalación en los lugares correspondientes. No podemos permitir que las cosas se sigan realizando bajo los mismos criterios de siempre: eso nos trajo a nuestra situación caótica actual. Si tan solo las instituciones trabajasen coordinadamente, se podrían evitar muchísimos errores básicos por falta de planificación, como éste.
Entre tantas derrotas a causa de la corrupción descentralizada, la escasez de vacunas, y la falta de transparencia en los gastos públicos, ¿por qué es importante una mover una columna? Haber logrado esto es una victoria ciudadana. Simboliza que juntos, podemos hacer que otros se den cuenta de que la forma tradicional de trabajar está mal. Unidos, tenemos una voz más fuerte, y podemos hacer que la gente con poder de decisión entre en razón. Unificados, demostramos que es posible cambiar la manera de hacer las cosas, y que ya no aceptamos el “así nomas” y el “ya da ya.” Queremos un Paraguay bien hecho, donde se respeta a todos por igual: desde el Presidente al peatón, y donde hasta la columna más insignificante esté instalada correctamente.
*Andrea Burt es Practicante de Desarrollo Social. Tiene una doble licenciatura en Gobierno y Desarrollo Social por Connecticut College, y es MSc en Desarrollo Social en Práctica por University College London. Es becaria Chevening, y desde el 2018 ejerce el cargo de Directora Ejecutiva de Sistema B Paraguay.